martes, 25 de noviembre de 2008

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Espinete somos todos


No podiamos dar el pistoletazo de salida a este blog sin escribir unas líneas sobre el personaje protagonista del mismo. Un erizo por todos conocido. Un Erizo gigante y rosa, de enorme nariz y que curiosamente vivía entre los humanos en una especie de caseta de color verde. Para ir entrando en materia no os podéis perder esta cancion:



Nos podríamos pasar horas y horas comentando los mensajes que Espi, al que denominaremos así a partir de ahora porque siempre le hemos considerado un colega más, nos lanza con este tema. Sólo vamos a destacar una frase:

"Tengo pinchos en la espalda, pero por delante no, para que cuando te abrace no te pinche el corazón"

Leelo varias veces... Repásalo mentalmente... Escríbela en un folio... Sí, es lo que estás pensando... Espinete era un asesino en potencia... ¿Cómo que pincharte el corazón? ¿Si hubiese tenido pinchos por delante hubiese ido estrujando niños contra su pecho ensartándoles?. La verdad es que la imagen de Espi con el pecho ensangrentado y con cara de psicópata podría destruir la infancia de muchas de las personas que nos pasamos las tardes embobados frente a la tele siguiendo sus andanzas.

Uno de los temas que más polémicas han suscitado en torno a Espi ha sido el siguiente: ¿Por qué si se pasaba el día desnudo, para irse a dormir se ponía pijama y para bañarse, bañador?
¿Qué había en esa caseta que le daba vergüenza? Esto puede dar mucho que pensar...

Al lado de Espi teníamos siempre la misma fauna autóctona del Barrio Sésamo. Jugaba con 3 niños, los cuales seguro, que ahora de mayores sueñan con erizos de colores y viven traumatizados. También estaba Ana, la amiga super mega guay chachi piruli de la muerte mega positiva, que se encargaba de levantar el ánimo del barrio y proponer cantidades absurdas de juegos que los niños ejecutaban sin rechistar. Uno de los personajes que siempre se nos escapan es Julián, el vendedor de caramelos, pipas y demas elementos chucheriacticos del que también se sospecha como posible incitador a la más que presunta drogadicción (seamos serios: ¿quién era capaz de vivir con un erizo rosa y un muñecote extraño e indefinible llamado don Pimpón sin flipar?).También nos podíamos encontrar por ahí merodeando a Chema el panadero, extraño personaje bailarín del que tendremos que hablar en otra ocasión. Y por último, y no por ello el menos importante, Don Pimpón, el inseparable amigo de Espi. Las preguntas de ¿Dónde se conocieron? y ¿Qué relación había de verdad entre ellos?, siempre será una incognita para nosotros.

Nos podríamos pasar horas y horas hablando de este encantador personaje que alegraba nuestras meriendas phoskiteras y llenaba nuestras estanterias en forma de muñequito de plástico, pero hoy no damos para más, demasiadas imágenes aterradoras han vuelto a nuestras mentes con este estudio... hay q reposar. De todas maneras, siempre nos quedarán sus canciones... ¡¡Comemos Mamut con mucha salsita!! (ya no se ni lo que digo...)

P.D. ¿Os habéis dado cuenta de que la niña de Barrio Sésamo era Ruth Gabriel? ¿Ninguno de vosotros se traumatizó al verla después en "Días Contados" siendo la putita personal de un etarra y, encima, yonki? ¿Julián y Chema (D.E.P.) tuvieron algo que ver? Pensad, humanos, pensad.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Me parto...y mira que os saco cinco años, pero en el fondo somos de la misma genración...hemos crecido con los mismo...Y todas esas preguntas nos llevan a las mismas respuestas...sin traumas...q tenemos la mirada sucia!!!!!

El Crazy Xabi dijo...

creo que la gran pregunta siempre ha sido... ¿pero que coño se supone que era Don Pimpón? Un marciano, un mutante, una alucinación colectiva...??

Puede que nunca lo descubramos...

 
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